Hace unos días, el Centro de Investigación Innocenti (IRC) de UNICEF publicó, en Florencia, el informe Child Safety Online: Global challanges and strategies. En este informe, el IRC presenta las amenazas actuales que existen para la seguridad y los derechos de los niños por lo que se refiere a Internet y otras tecnologías.
Uno de los datos que destaca el director del IRC, Gordon Alexander, es la oportunidad que tenemos delante y debemos utilizar de que hay muchos chicos/as expertos y conscientes de los riesgos que hay en la Red, y estos deberían ser los que ayudasen a los más pequeños a conocerlos y evitarlos. Así pues, según Alexander, varios estudios muestran que los mismos jóvenes o menores se ven como protectores online de otros chicos, y es en esa capacidad de autoprotección en la que debemos poner un poco más de confianza.
Grooming
Por lo que se refiere al tema del que nosotros, desde Internet grooming, ¡denúncialo!, intentamos informar, el documento cataloga el abuso sexual infantil y el grooming a menores como uno de los riesgos principales que amenazan a los niños y niñas en la Red, además del ciberbullyng o el ciberacoso. De este modo, según los autores de dicho informe -y tal y como algunos expertos nos han contado ya en el blog- los programas públicos de protección de la infancia no han hecho una integración suficiente de esta problemática online. Así como tampoco desde el sector privado existen unas medidas necesarias para proteger los derechos de los más pequeños ya que las empresas tienen miedo de perder competencias o libertades de empresa.
Por otro lado, el estudio amplia la definición del online grooming poniendo como punto de mira la necesidad de engaño que la actual definición exige. Así pues, se amplía la definición a cualquier persona que intente contactar con un@ menor con intenciones sexuales, aunque lo haga abiertamente -es decir, aunque el predador informe literalmente al menor de sus verdaderas intenciones-. El estudio, también concreta que dichas intenciones son, principalmente, el contacto sexual de forma online, generalmente vía webcam, y que genera material que más tarde es compartido con otros, y que sólo en algunas ocasiones lleva o pretende llevar a un encuentro sexual físico.
El informe también detalla los lugares de Internet en los que normalmente se realizan actos de grooming:
- salas de chat
- redes sociales online (como Facebook, Twitter, My Space, Tuenti…)
- servicios de mensajería instantánea (como Messenger, Google Talk…)
La investigación nos otorga, además, algunos datos muy interesantes referentes a los groomer (entendidos así los predadores o pedófilos). Estos, pueden llegar a tener hasta 200 menores en sus listas de amigos en diferentes fases del proceso de grooming (que puede durar desde unos minutos hasta unos meses), y el estudio también detalla que las víctimas más frecuentes suelen ser chicas adolescentes.
El informe también desmiente algunos de los mitos que existen entorno a los ciberacosadores:
- No suelen ser extraños sinó cuidadores los que generan y difunden las imágenes de los menores.
- Los groomers no suelen ser hombres mayores que fingen una edad menor para engañar a los menores con mentiras e identidades falsas obligándolos a entregar sus imágenes sexuales. Son, más bien, procesos de seducción en los que el/la menor acaba accediendo a las pretensiones sexuales como un favor voluntario hacia un amigo virtual. Es decir, aunque en ocasiones los groomers mienten sobre su edad o sexo, suelen encajar por lo general en un caso de relación con consentimiento.
Resumen
De una forma más esquemática, los cuatro objetivos que el documento propone, son:
- Empoderar a los niños y promover su resiliencia
- Acabar con la impunidad de los abusadores
- Reducir la disponibilidad del material nocivo de Internet
- Promover la recuperación de los niños que han sido víctimas de abusos y otros daños.
Además, el informe menciona algunos datos al respecto de estos problemas:
- La cifra de imágenes de abuso a menores en Internet es de varios millones.
- Los niños que aparecen en ellas es probablemente de decenas de miles.
- La mayoría de las imágenes representan a niñas preadolescentes (desde menos de 1 año a 10), de raza caucasiana.
- Se observa una tendencia a la baja en la edad de los/as niños/as que aparecen en las imágenes, y a una mayor violencia y explicitud gráfica.
- Las imágenes cada vez se concentran menos en determinados webs y están más repartidas en su almacenamiento. En esta línea,cada vez se usa más la compartición P2P.
- Hay muy pocos datos sobre las consecuencias de la exposición de los menores a formas extremas de pornografía fácilmente disponibles online.
- Está aumentando la preocupación ante casos de adicción a la pornografía entre menores, así como la reproducción entre chicas menores de los estereotipos femeninos de la pornografía, tanto en lo que respecta a la apariencia como a los comportamientos sexuales.
- Los jóvenes se sienten a menudo más cómodos compartiendo informaciones íntimas o comportándose de una manera sexualizada online que fuera de la Red.
- Hay un número significativo de adolescentes que están publicando imágenes suyas en la Red de tono sexual. En ocasiones esto da origen a procesos de sextorsión. En otras, atrae a posibles predadores sexuales.
- Los chicos dicen conocer en general los peligros de la Red, pero creen que son otros los que corren esos riesgos, más que ellos mismos.
- Con frecuencia no acuden a sus padres cuando tienen problemas, por lo general porque creen que no entienden ese mundo, porque temen que les quiten su teléfono o el acceso a Internet, por amenazas de algún abusador o por simple vergüenza. En el caso de los adolescentes, habitualmente consideran la intervención paterna o materna una interferencia que choca con la tendencia natural de esa edad a comenzar a separarse de los padres en muchos ámbitos de su vida. Sin embargo, hay numerosas pruebas de que la activa implicación y diálogo de los padres es el factor de protección más fuerte que existe en este terreno.
- El hecho de que los padres pierdan capacidad de vigilar el uso que sus hijos hacen de la Red por el incremento en la conexión móvil (60% de los menores en Japón, p.ej.) supone un reto que requiere modificar las políticas de prevención.
- A quien acuden en primer lugar los niños con problemas en la Red es a otros niños. Por tanto el informe sugiere apoyar a los niños en esta misión.
(Datos extraidos del Informe Child Safety Online: Global challanges and strategies de UNICEF, y del blog de Pantallas Amigas)
Melian Sanz Porto (en Twitter: @MelianSP)